Efusiones fecundas
agilizan mis sentidos
y le dan resistencia
para seguir la lucha.
Desérticas y turbias
son mis situaciones
hasta que tú asomas
y me das seguridad.
Mi apenado corazón
se halla centelleante
al darle luminosidad
en mis días sombríos.
¡Ay! Si ves esa llama
que arde dentro de mí.
Sé que si moras en ella
no podrás desprenderte.
El romance misterioso
que me hace soñar
permanece llameante
y existirá hasta el final.
Porque lo que persevera
no caerá en el olvido
ni ha de quedar invisible
al intensificarlo el amor.